• La mujer protagoniza el paro en Cantabria durante febrero

Santander, 2 de marzo de 2022.- El mes de febrero en términos de empleo no suele ser amistoso para las regiones que han orientado su economía al sector servicios y al turismo como es el caso de Cantabria. Lo que es evidente que la economía de nuestra autonomía se descuelga del resto del país y confirma que marcha en distinta velocidad. El diferencial de recuperación de paro registrado en términos anuales con la media española aumenta hasta los 7 puntos negativos, una muestra más de que se están produciendo fallas importantes en la acción de gobierno. Un ejecutivo que parece incapaz de salir de un bucle de conformismo y manifiesta una falta de ideas para producir cambios estratégicos que sin duda necesita nuestro autogobierno.

Esta deriva debe ser atajada sin esperar a la cataplasma del empleo de temporada ni al atractivo de los marcos incomparables.

Por otro lado, resulta muy preocupante la evolución del empleo y el impacto social del mismo en comarcas como Torrelavega o el arco sur de la Bahía.  Será difícil lograr un desarrollo equilibrado de la región si áreas de la importancia de la cuenca del Besaya no logran buscar alternativas a la crisis de sectores productivos estratégicos.

El empleo femenino es otra de las víctimas que produce la economía con alta exposición a la estacionalidad. Febrero hace crecer el paro a costa de las mujeres por su dependencia del sector servicios y una alta exposición a la temporalidad. A escasas fechas de la celebración del Día Internacional de la Mujer el mejor homenaje que se les puede brindar es ofrecer modelos productivos en el que prime la especialización laboral y por tanto se genere sectores sin temporalidad.

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