El sindicato denuncia la actitud de ambas organizaciones que pretenden situarse peligrosamente por encima de las instituciones democráticas.
Santander, 11 de febrero de 2022.- La autoexclusión de los sindicatos UGT y CC.OO del Consejo Económico y Social de Cantabria (CESCAN), como respuesta a la participación del sindicato USO en el órgano consultivo, es una grave irresponsabilidad y un ataque a los cimientos democráticos de dos formaciones sindicales que reciben cuantiosas subvenciones de dinero público.
Ambas organizaciones han llevado a cabo un chantaje al Gobierno cántabro con la pretensión de torcer el brazo a la voluntad política inequívoca de crear un órgano participativo y plural que viene recogido en el artículo 131.2 de la Constitución y que está avalado por unanimidad por el Parlamento cántabro. Dicha medida de no participar en el CESCAN es asimismo una muestra del preocupante sectarismo que destilan las direcciones de ambas formaciones sindicales que pretenden anteponer el mal llamado “Dialogo Social” a la soberanía democrática del Parlamento y Gobierno de Cantabria, queriéndose situar peligrosamente por encima de las instituciones democráticas
Para USO, la autonomía pasa actualmente por un momento delicado dentro de sus 40 años de historia. La región muestra un serio declive fruto de problemas estructurales que deben ser corregidos. Es necesario impulsar el autogobierno con un nuevo modelo productivo, económico y social que saque de los vagones de cola del desarrollo a Cantabria en los que está instalada. Y es precisamente el CESCAN un medio de comunicación y participación de la sociedad civil, donde se da cabida a la pluralidad de la sociedad cántabra de forma permanente entre los agentes económicos y sociales y el Gobierno, cuyo principal objetivo debe ser la colaboración en la búsqueda de ese nuevo modelo desde la pluralidad y participación de la sociedad cántabra.
La negativa de UGT y CC.OO a la participación quizá responda al hecho de que en el actual modelo de CESCAN ninguna organización participante recibe cantidad económica alguna, a diferencia del pasado CESCAN que tuvo que ser eliminado al hacerse públicos los gastos en fastos y copas de algunos de sus miembros. Quizá estas formaciones sindicales no se sienten cómodas dentro del actual modelo.
El sindicato USO insta a UGT y CC.OO a que si consideran ilegal el CESCAN recurran a la justicia y respeten las decisiones democráticas de las instituciones de Cantabria.
Por último, USO lamenta profundamente el deterioro de la arquitectura social que sufre nuestra región con hechos como este y anima a toda la sociedad civil y a todas las organizaciones sociales, empresariales y profesionales a arrimar el hombro en buscar soluciones conjuntas que saquen a Cantabria de la situación actual mediante un impulso y un proyecto consensuado de futuro.