- Todos los sectores destruyen empleo menos la Administración regional que ha aumentado un 6,8%
- Sólo 1 de cada 4 parados percibe una prestación
Santander, 5 de enero de 2021. En términos de empleo, el balance del año 2020 es demoledor. La debacle del empleo nos devuelve a los años centrales de la última gran crisis. El último balance de paro registrado constata lo que Cáritas ya había avanzado: 1 de cada 4 cántabros se sitúa al borde de la exclusión. Una emergencia social.
La cifra interanual de incremento de 5.900 parados registrados, un 16%, con seguridad aumentará de manera sensible cuando sea retirada las suspensiones de contrato por Covid. Una parte importante de los 2.194 trabajadores cántabros afectados por ERTE a final de año pasarán a engrosar la lista de parados. La cifra real de incremento de paro se elevará por encima del 20% al cierre del año 2020
La crisis económica provocada por la pandemia resulta letal para todo el sector privado pero, aunque resulte incongruente, ha beneficiado al empleo del sector público. El total de asalariados del sector público asciende a 35.641 y durante el año 2020 se elevó en 1.720 empleados más, un 5%. Lo reseñable es que el 98% de ese incremento correspondió a nuevas plazas creadas en el ámbito de la Administración regional. El empleo en los ayuntamientos de Cantabria creció un 0,4% y el dependiente de la Administración central bajó un 0,5%.
Los beneficiarios de una prestación por desempleo sólo alcanza a 1 de cada 4 parados registrado, el 26% del total. Una cifra claramente insuficiente que pude agravarse si la pandemia no es atajada y la economía continua en el bloqueo actual. Para muestra el botón de las contrataciones del pasado diciembre que se redujo en 5.137 con respecto al mismo mes del año anterior.
Nuestra región comenzó el año 2020 con serios problemas estructurales que tenía un efecto divergente con el resto del Estado. La llegada de la pandemia ha agravado esa situación, estando por llegar el demoledor efecto sobre la hostelería, turismo y comercio, sectores claves en la economía regional. Parece que la respuesta política es poner a la Administración regional a tirar del empleo y por tanto de la economía. Una fórmula que ya ha sido probada y que todos sabemos sus consecuencias. Urge reactivar el sector servicios y con ello la economía en su conjunto de manera inmediata. No ayuda que nuestro Gobierno regional se situé a la cola en la administración de la vacuna precisamente cuando es el sector público regional el más reforzado en este periodo de crisis. Hay responsabilidades que deben ser revisadas de manera urgente.