Santander a 27 de abril de 2023.- La primera EPA del año 2023 deja unos datos positivos para el mercado de trabajo en Cantabria. La reducción del desempleo durante un primer trimestre en 2.800 personas es sin duda una buena noticia. Una Semana Santa adelantada por el buen tiempo, la cercanía de un periodo electoral con el fuerte aumento de gasto en obra pública y la creciente oferta de trabajo en las diferentes Administraciones está ayudando a recortar el desempleo, aunque esto vaya engordando la deuda pública regional.
La EPA también deja datos para la preocupación y el análisis. Cantabria ha crecido en población mayor de 16 años un 2 por ciento en el último año pero los activos, personas en disposición de trabajar han disminuido. Tanto en el último trimestre como en términos interanuales la tasa de actividad presenta un balance negativo. Año tras año este parámetro actividad decrece de una forma casi constante. Antes de la pandemia el diferencial con la media estatal en la tasa de actividad era del -3,81 por ciento, en estos momentos ha aumentado al -4,34 por ciento. Cada año las personas inactivas crecen en la región en un claro síntoma de envejecimiento y de falta de confianza en la empleabilidad, especialmente en los parados de larga duración que acaban tirando la toalla, especialmente en las franjas de edad por encima de los 50 años. Una auténtica lacra que debe ser abordada con medidas concretas y efectivas.
En el mismo sentido, la tasa de actividad en las mujeres cántabras sigue siendo muy bajo respecto a la media nacional, cae al 49,86 por ciento, lejano al 54,18 por ciento estatal. Los hombres se sitúan en un 58,8 por ciento, también lejos del 63,1 por ciento de la media española. También hay que poner el acento un dato preocupante como es que la tasa de paro de la mujer se sitúa casi 5 puntos por encima de los varones