La EPA constata la decadencia de Cantabria

  • Disminuye el paro interanual a costa de menos población activa, aumento importante de los inactivos y el incremento de empleo público
  • Aumenta la brecha de tasa de actividad con la media española

Santander a 27 de octubre de 2022.- El análisis de la EPA del tercer trimestre constata la decadencia de la región. Para los más optimistas señalarán que el paro ha decrecido en un 15,9 por ciento en el último año, ya descontados los desempleados de final de temporada veraniega, y eso hará sacar pecho a nuestro ejecutivo.

 La otra cara de la moneda es que la EPA retrata con trazo fino el progresivo deterioro de la sociedad, su fuerza laboral y como consecuencia su economía. Según la EPA, nuestra región sigue menguando su población activa. En este último año 5.400 personas han desistido de buscar empleo, un retroceso del 1,92%.  En España la población activa ha aumentado en 0,33%.

Al mismo tiempo en nuestra región disminuyen los ocupados en 9.000 trabajadores, un -0,35%, mientras que España aumenta en un 2,67%. Como consecuencia, la población inactiva ha aumentado en un solo año en 8.800 personas, un 4,13%, mientras que en España lo hace en 1,49%.

Otro dato que, según la EPA, confirma la falta de dinamismo de nuestra región es que la tasa de actividad ha bajado en un -2,59% mientras que la media española ha sido de un -0,47%.

Los datos de la EPA distan mucho de ser positivos. El paro interanual baja por dos factores destacados: cada vez hay menos población activa y el tirón del empleo público. No es consecuencia de una recuperación económica y por tanto la sociedad se hace más dependiente de las ayudas públicas y nuestros sectores productivos estarán más lastrados. Un bucle muy negativo que para romperlo será necesarios cambios de carácter estructural. Y parece que en el horizonte político no se vislumbra cambios significativos.

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