• Pero se sitúa por debajo de la media nacional en términos interanuales
  • La industria aguanta mientras se prepara para un difícil otoño

Santander a 2 de agosto de 2022.- Cantabria vuelve a ser la reina del empleo en verano. La bajada del paro registrado es el reflejo del potencial turístico de la región y sin duda es un dato positivo. Aunque el empleo creado siga siendo estacional y con una gran dosis de precariedad. La reforma laboral, sin negarle que sea voluntariosa, no cambia la estructura del empleo. Así lo manifiesta los datos de la Seguridad Social que registra un aumento interanual del 247 por ciento del contrato fijo discontinuo y un 11,7 por ciento del contrato indefinido a tiempo completo.

Julio nos deja un dato alentador. La reducción de paro registrado en la industria antes de un otoño que trae muchas incertidumbres. La fuerte reducción de la demanda que ya descuentan los mercados en los próximos meses traerá consigo una adaptación de las producciones y por ello hay que destacar la evolución de este sector. También toca reconocer el esfuerzo del sector industrial en un contexto de precios desorbitados de la energía.

No obstante, la bondad estival no ha conseguido los niveles de paro ni de contratación previos a la pandemia que sí han conseguido otras comunidades. La tasa de paro interanual cántabra sigue por debajo de la media nacional, así como el incremento de afiliación media a la Seguridad Social, 2 puntos por debajo. Ello muestra la dificultad de nuestra economía más allá del turismo de terraza y sombrilla.

Cantabria necesitará algo más que una buena campaña de verano para afrontar un año con especial dificultad y que no se prevé acciones correctoras relevantes dado que entramos en periodo electoral y todo el esfuerzo de la política no va dirigida a la acción de gobierno si no a la búsqueda del voto.

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