Habrá un nuevo convenio con una vigencia de 5 años y que recupera el poder adquisitivo perdido durante la crisis
Tras más de 12 horas ininterrumpidas de negociación, y a escasos minutos del comienzo oficial de la huelga de transporte de viajeros, se alcanzó un acuerdo entre los sindicatos USO, CC.OO y UGT con la patronal que pone fin al conflicto en el sector.
El acuerdo tiene de vigencia desde el 1 de enero de 2019 hasta el 31 de diciembre de 2023. El incremento salarial pactado supone el 1,20% para el año 2019 y el IPC real del año anterior más un 0,40% para cada uno de los años restantes.
En el supuesto de que alguno de los IPC de los años de vigencia fuera negativo, el incremento correspondiente a ese año sería del 0,25%. Si fuera superior al -1%, no habría incremento salarial.
Por otro lado, la empresas del sector estarán obligadas a utilizar el tacógrafo en todos sus vehículos y servicios.
Asimismo se regula el control de alcohol y drogas a través de un procedimiento que es copia literal del convenio colectivo de la vecina región de Asturias.
Una vez alcanzado el acuerdo, los sindicatos han desconvocado la huelga prevista entre el 5 y el 9 de noviembre.
El acuerdo queda condicionado a la aprobación por las respectivas asambleas que cada organización sindical realice, así como las juntas directivas de las organizaciones patronales.
Para USO, el acuerdo es positivo. Era intención haber logrado la recuperación del poder adquisitivo durante el año 2019, al menos en una gran parte, pero ha habido que pactar recuperar ese poder adquisitivo perdido a lo largo de la vigencia del convenio.