El 14 de junio de 2024 se firmó un acuerdo con la Junta de Personal Docente sobre el modelo de atención a las aulas de primer ciclo de Educación Infantil (0 – 2 años) para implantar en el curso 2024-2025.
Ya que en el desarrollo de dicho acuerdo, la Administración considera que las aulas de 1 a 2 años deben contemplarse como una etapa completa, no de forma aislada ni por separado, con una visión más integrada, es importante a nuestro entender mantener dicha visión en nuestros centros.
Pero somos conscientes de que nuestros centros parten de una realidad bastante diferente a la de los centros públicos ya que, al ser una etapa puramente privada, en muchas ocasiones ahoga presupuestariamente a los centros, la pareja pedagógica defendida se hace difícilmente sostenible en los centros sostenidos con fondos públicos.
Es por eso necesario, nuevamente, reabrir la solicitud de los conciertos educativos en esta etapa y que sea implementado el poder disponer de ese concierto existiendo la demanda y condiciones oportunas mediante una posible vía negociación. A su vez remarcamos como prioritaria la necesidad de mantener una igualdad de trato entre los alumnos de Cantabria a la hora de pedir cubrir las necesidades de los alumnos y aportar una mayor calidad e igualdad en ambas redes educativas.
Somos conscientes de que dicha etapa no es obligatoria, pero hoy en día está más que implementada en nuestra sociedad y favorece a la conciliación familiar y la pronta inserción al Sistema Educativo cántabro y hemos observado que otros gobiernos autonómicos del mismo signo han apostado por dicho modelo. Cantabria no puede quedarse atrás en la posibilidad de elección de centro y no debe de ser impeditivo el tema económico como condicionante.
Por otro lado, ya hemos vivido como curso tras curso, y, ya firmado el acuerdo de 2008, no se ha recuperado lo rubricado en cuanto a la reducción de carga lectiva a los mayores de 55 años y creemos que es más que necesario que se afronte por parte de la Administración la
interlocución para rescatar ese pacto para los docentes de Concertada en Cantabria que , insistimos, ya fue recogido en el acuerdo de centros en crisis de 2008.
La inacción en este ámbito por parte de Administraciones pasadas, brindan una oportunidad a la actual de sentarse en nuestra Mesa a buscar acuerdos y consensos, máxime cuando se ha rubricado con la Junta de Personal Docente el pasado junio un acuerdo similar. Entendemos que somos igualmente docentes y la reivindicación se ha convertido ya en histórica con la Consejería.
Así como de hablar de la jubilación parcial y la situación de la misma de nuestro sector en este momento.
Realizado el análisis económico de la homologación salarial entre la red concertada y pública, nos estamos alejando del 90% que ya el 2023 era del 88% y que ahora, tras las progresivas subidas del 0,5 % debido a los indicadores económicos, creemos que convendría revisar de nuevo el capítulo de dicha homologación.
En el ámbito de Atención a la Diversidad en nuestros centros que disponen de Orientación Interna el requisito para su contratación parte de la base Máster en Orientación como indispensable. Entendemos que no es justo que se aplique el criterio de selección y, en cambio, no se remunere como dicha categoría profesional a todos los efectos dentro del ámbito profesional en el desempeño de sus tareas.
Hace tres cursos académicos estuvo encima de la mesa la reducción de una hora lectiva dentro de la jornada laboral de los docentes centrada mayormente en el ámbito de Educación Secundaria, ya que en la Educación Pública existe una horquilla horaria que parte en ese momento era de 18 horas lectivas. Situación bien distinta es la de los docentes de nuestros centros que poseen, su gran mayoría las 25 lectivas suponiendo una diferencia en la carga lectiva más que evidente. Con lo cual nos gustaría se retomase esa cuestión de nuevo en la Mesa de Negociación.
Si bien remarcar al respecto que el convenio hace clasificación con la existencia de complementos entre los diferentes jefes de departamento pero no se percibe cuantía ninguna por el desempeño de tales funciones existiendo únicamente las relativas a Jefatura de Estudios y dirección. Tampoco la relativa al secretariado que, aunque no aparece en el Convenio sí existe dicha diferenciación de funciones en la práctica.
La Figura de Coordinador de Bienestar sujeto a Fondos Europeos creada recientemente, se traduce en una tarea más de las ya asignadas, pero no supone ni una mínima liberación de carga horaria con lo cual supone cargar de más tareas la figura destinada a tales fines entendiendo que si su liberación que se afronta con dichos fondos en ningún caso se entiende que no puedas destinarse para nuestros centros, o al menos en proporción.
En cuanto a la reducción de ratios proponemos que se estudie progresivamente el reajuste en nuestras aulas, aunque somos conscientes que se tiene en cuenta el número para el mantenimiento de aulas.
En resumen y para concluir, nuestro sindicato tiene claro que los alumnos de Cantabria no pueden sufrir impacto alguno dependiendo de qué centro hayan elegido sus familias para cursar sus estudios.
La calidad educativa es óptima en ambas redes, pero las condiciones laborales de los docentes de nuestra red están atadas por un convenio que poco margen deja a la improvisación. La posibilidad de mejora es la que queda abierta a ser negociada con las distintas administraciones, para que el impacto en los centros educativos no repercuta en exceso en las condiciones laborales de nuestros docentes.
La libertad educativa es importante y necesaria en esta sociedad porque promueve y fomenta la pluralidad que es síntoma de una sociedad más libre y desarrollada.