El conflicto del transporte de viajeros por carretera  no tiene visos de solucionarse. Todo lo contrario. La falta de diálogo que ha mostrado hoy la patronal en la mediación ante el ORECLA ha llevado a plantear  a la parte social  un aumento  de las medidas de presión con una extensión de la huelga más allá de la anunciada para la semana del  5 al 9 de noviembre. No obstante, las partes han quedado citadas por la Dirección General de Transporte del Gobierno cántabro el próximo lunes a las 12:00 para fijar los servicios mínimos y quizá dar una oportunidad a la negociación con  la administración regional como mediador.

Tanto USO como UGT y CC.OO van a estudiar la posibilidad de extender el conflicto a otras fechas de noviembre si descartarse llevar el conflicto al “puente” de la Constitución. Todo ello tras más de una hora de reunión en la que no se registró avance alguno y por tanto concluyó sin avenencia.  USO informó que  la patronal mantiene su oferta de incremento salarial (el IPC para este año y un alza del 0,25% para los siguientes) mientras que los representantes de los trabajadores insisten en mayores subidas para compensar el poder adquisitivo perdido.

La negociación del convenio colectivo lleva diez meses sin avances y los sindicatos creen que no se puede esperar más, si bien están dispuestos a  mantener los contactos y posibilitar un desbloqueo de la negociación que permita evitar el conflicto.

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