La empresa de Barreda ha decidido abaratar costes y quedarse con sólo una contrata, Telnor, que ha propuesto a los empleados de Mego renunciar a todos sus derechos, incluso a su indemnización por despido, para ser contratados

El inicio de este año 2017 ha traído malas noticias para los trabajadores de la contrata de Mego, que trabaja en Solvay. Según el sindicato USO los 16 trabajadores están siendo víctimas de «abuso laboral» y «explotación» y todo ello provocado por el ajuste de costes impuesto por la fábrica de Barreda con su nuevo modelo de contratas.

Y con este panorama, la nueva adjudicataria, ha negado la subrogación y la sucesión empresarial de los 16 trabajadores de Mego, a los que exige «la renuncia de sus derechos a pluses, antigüedad y la solicitud de baja voluntaria de su anterior empresa, renunciando así, a su indemnización por despido solo para poder ser contratados», denuncia USO. El sindicato además añade que estos trabajadores «han sido sustituidos después de más de 25 años de actividad ininterrumpida»

Solvay ha decidido abaratar costes en la contrata y se la ha adjudicado a una sola empresa, a Telnor. En los últimos años la realizaban tanto Mego como Telnor, pero a partir del 1 de enero solo esta última seguirá trabajando para Solvay.

USO considera «repudiable los efectos de esta práctica impuesta por Solvay, que supone una escalada en la precarización del trabajo, camino de la explotación; sometiéndoles al chantaje de tener que renunciar a sus derechos para seguir haciendo el mismo trabajo»

El sindicato USO y la Sección Sindical USO-Solvay creen que Solvay-Torrelavega «se equivoca profundamente si pretende conseguir su competitividad, mediante esta práctica que supone un recorte de gastos económicos limitado y por el contrario representa un coste brutal de pérdida de conocimiento, profesionalidad y experiencia largamente acreditada».

La competitividad, según señala USO, pasa por que el grupo Solvay «decida realizar en Torrelavega las cuantiosas inversiones que se necesitan para renovar la generación eléctrica-vapor, para ganar eficiencia, competitividad y una importante reducción de sus emisiones contaminantes de dióxido de de azufre y dióxido de nitrógeno»

 

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